" La alegría se encuentra en el fondo de todas las cosas, pero a cada uno le corresponde ectraerla".
domingo, 29 de diciembre de 2013
Busca un estado de ánimo mas positivo
jueves, 26 de diciembre de 2013
Vence tus obstáculos para el cambio
Los pequeños cambios y transformaciones son nuestra forma de evolucionar y desarrollarnos. Es una adaptación necesaria al entorno cambiante que nos rodea. Sin embargo, a menudo nos resistimos y nos aferramos a las seguridades del presente ya sea por inconsciencia o tristeza. Revertir estas actitudes nos permitirá cambiar de forma positiva.
Para que un acontecimiento doloroso se convierta en crecimiento es imprescindible generar una reflexión en torno a lo que ocurrió, la forma en que reaccionamos ante ello, lo que hicimos bien, lo que no salió según nuestras expectativas y la forma adecuada en la que se tenía que haber superado.
Cuando la tristeza te haga sentir que no puedes más, piensa en el futuro después de haber solucionado tu problema. La alegría, la ilusión de vernos en un futuro mejor, la esperanza de llegar a ser quienes queremos ser, son las fuentes de energía para acometer las transformaciones positivas que necesitamos.
Si de verdad quieres cambiar, la fuerza para conseguirlo está en tu interior. Primero, se modesto y medita sobre ti, busca tus espacios de reflexión, busca tus fortalezas y los recursos con los que cuentas para generar esas modificaciones que deseas.
Evita la dependencia de cualquier práctica externa que te evite llegar a los cambios, busca la alegría en el cambio y visualiza con entusiasmo los hábitos nuevos que te gustaría adquirir. Proponte objetivos sencillos, específicos y realistas.
Practica las conductas que te has propuesto hacer, ya que la acción te ayudará a llevarlas a cabo de manera más eficaz. A través de pequeños actos reiterados irás adquiriendo nuevos hábitos de comportamiento y actitudes.
Cada cierto tiempo identifica y evalúa tus éxitos, centrando tu atención en los actos que consideres correctos y cuyo modo de resolución se debe mantener y consolidar en el futuro.
Se persistente y repetitivo. Sólo insistiendo en tus actitudes adecuadas podrás cobsolidarlas.
domingo, 22 de diciembre de 2013
Pensamientos positivos autocurativos
Los pensamientos angustiosos, de inseguridad o temor que a veces tenemos, pueden interferir en la coordinación de nuestro cerebro con los sistemas nerviosos, inmunitario y endocrino, alterando o impidiendo la tarea de curación. No dejemos que nos destruyamos nosotros mismos y piensa EN POSITIVO. Las emociones y pensamientos constructivos contribuyen positivamente en estos procesos autocurativos.
miércoles, 18 de diciembre de 2013
Adiós estrés
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiDZsrEX_1KfvuQ3NIofOFyKEwyv-jKvECKbJWLRs2qrX_Zl9gkT-Wgdfg4lLhyphenhyphendyRm-VEfGzCRKIQSIc9X4BwokSQYQONltyU_U0LNjTXdHt0mBaldl-fY-F3U_uQ6nZkwWhXcHk2bhoem/s320/estres1.jpg)
- Plantea los problemas. ¿Cuál es el problema? ¿Cuáles son as causas? ¿Qué soluciones posibles existen? ¿Cuál sería la mejor solución? Analiza de manera racional lo que te preocupa y actúa lo antes posible. Escribe las preguntas en un papel y trata de darles respuesta, te asombrará el resultado. Simplifica al máximo y no te salgas de las respuestas que tú mimo te has dado.
- Ríe y llora. Cuando puedas y cuando lo necesites, ¡te sentará bien! No reprimas tus emociones pensando en el qué dirán los demás, ya que esa conducta te llevará a un estado en el que no te sentirás agusto.
- Reduce el consumo de excitantes. La cafeína, la teína, el alcohol, el azúcar o el tabaco excitan demasiado al sistema nervioso. Consumir estas sustancias en épocas de estrés, lo único que hacen es crear un círculo vicioso del que es muy difícil salir. No creas en el tópico, porque fumar NO relaja, sólo calma la sensación de la necesidad de la sensación de tabaco que tiene el organismo de un fumador y aumenta los niveles de estrés.
- Hacer ejercicio. La actividad física nos ayuda a reducir los niveles de estrés e incluso nos hace más felices, ya que el cerebro segrega endorfinas durante el ejercicio. Por ello muchos deportistas tienen "mono" de deporte. El ejercicio físico te cansa y te ayuda a dormir mejor, además de que nos ayuda a sentirnos bien con nosotros mismos, lo que aumenta el autoestima y deriva en menos estrés.
- Márcate unos horarios. Las rutinas para comer y dormir son muy beneficiosas para el organismo. Si te cuesta dormir, intenta ir a la cama siempre a la misma hora y crea una rutina anterior. Por ejemplo: desmaquillarte, tomar una infusión, leer un poco... así el cuerpo sabe que toca dormir y se prepara para el sueño.
- Concéntrate en una sola cosa. Es una buena forma de reducir el estrés (manualidades, ganchillo o incluso pintar).
- Apaga el ordenador y el teléfono. Las pantallas lumínicas aumentan los niveles de estrés, así que apaga tus dispositivos electrónicos al menos una hora antes de ir a dormir para poder relajarte como es debido y descansar mejor.
- Busca tiempo para ti. Dedicas al menos un día a la semana a realizar actividades que no tengan nada que ver con tu rutina de trabajo y que realmente te gusten y te hagan disfrutar.
- ¡Piensa en positivo! Al igual que una conducta de pensamiento negativo nos lleva a un estado de depresión, pensar en positivo nos ayuda a mejorar. Intenta encontrar el lado bueno y fácil a los pequeños disgustos de día a día y no caigas en el error de dramatizar en exceso cosas que realmente no son importantes.
- Respira de forma consciente. Concentrarnos en nuestra respiración es otro de los métodos más utilizados para relajar el cuerpo y la mente en situaciones de estrés. Para lo que estés haciendo, busca un lugar tranquilo, siéntate y respira profundamente sin pensar en nada durante un par de minutos al menos. Verás como después las cosas se perciben de una manera diferente.
- Nadie es perfecto. Ten siempre presente que nadie es perfecto. Ni lo somos ni tenemos porqué serlo. Todos tenemos nuestros puntos fuertes y también nuestros puntos débiles, así que lo mejor es conocerlos y pedir ayuda si lo necesitáramos.
jueves, 12 de diciembre de 2013
Vence tus dudas ACTUANDO
Algunas facetas de nuestra vida están sin resolver porque no sabemos que camino tomar, y si hay varias opciones, cuál será el más conveniente. Ante esta duda, aparcamos el problemas y vamos a otra cosa, pero esta decisión sólo nos provocará malestar.
Lo mejor: hacerle frente y solucionarlo como podamos. No hay formas correctas e incorrectas de solucionar nuestros problemas, sólo cuanta nuestra decisión, porque si decides escogerla es por ti mismo y porque en ese momento es la que crees que mejor se adapta a ti. Entonces tira hacia adelante y no dejes que los demás te digan si es buena o mala, hazle caso a tu razón.
La decisión de pasar a la acción implica abandonar toda actitud pasiva y coger las riendas de tu propia vida. Dejar las excusas de las esperas y la ayuda de terceros. Decidir y actuar por ti mismo y por tu mejoría personal.
Francesc Miralles, en su libro "En la dieta espiritual", propone usar el pensamiento integrador; es decir, en lugar de escoger entre dos opciones, unirlas y crear una tercera vía con la que actuar. También es importante evitar el lenguaje y pensamientos reactivos: "no soy capaz", "es imposible", "no lo conseguiré"...
Decidir usar un lenguaje y pensamiento proactivo, el que busca responder a un "para que" más que a un "por qué".
Como siempre digo, mejorar y sentirte mejor está en tu mano, y sólo tú puedes decidir si quieres hacerlo.
miércoles, 4 de diciembre de 2013
Déjate ver y nunca te rindas
Eres libre para elegir, para tomar decisiones, aunque solo tu las entiendas. Tomas tus decisiones con coraje, desprendimiento y, a veces, con una cierta dosis de locura. Sólo entenderemos la vida y el universo cuando no busquemos explicaciones. Entonces todo queda claro.
Aprender algo significa entrar en contacto con un mundo desconocido, en donde las cosas más simples son las más extraordinarias. Atrévete a cambiar, desafíate, no temas a los retos. Insiste una, y otra, y otra vez. Recuerda que sin fe, se puede perder una batalla que ya parecía ganada. No te des por vencido. Acuérdate de saber siempre lo que quieres, y empieza de nuevo. El secreto está en no tener miedo de equivocarnos y de saber que es necesario ser humilde para aprender.
Ten paciencia para encontrar el momento exacto y congratúlate de tus logros. Y si esto no fuera suficiente...
Analiza las causas e INTÉNTALO CON MÁS FUERZA.
El mundo está en manos de aquellos que tienen el coraje de soñar y de correr el riesgo de vivir sus sueños.