Ahora sí que estamos a las puertas de un año nuevo y ya va tocando pensar en los propósitos para el 2015. ¿De verdad funciona esto de los propósitos de nuevo año? ¡¡¡Todo depende de ti!!!
Esto de los propósitos es algo que todas las personas nos planteamos al comienzo de un nuevo año, todos queremos mejorar nuestras vidas. Lo primero que debemos hacer es pensar si los propósitos que nos planteamos en 2014 los conseguimos. ¿Lo hicimos?
Debemos reflexionar el cómo lo hicimos y el porque lo conseguimos o no. A partir de aquí podremos trabajar en los nuevos propósitos para lograr llegar hasta el final.
Desde el punto de vista de la psicología es muy positivo hacer este tipo de reflexiones, siempre y cuando no se queden en pensamientos son acción ni esfuerzo. No sólo consiste en hacer una lista y ver si a final de año lograste lo que pone, debes concienciarte en ella y llevarla a cabo, hacer lo que puedas por conseguir tus propósitos. No importa que no se cumplan, lo importante es que pongas lo mejor de ti para conseguirlos. Y por supuesto, luchar por ellos, que por ellos solos no llegarán al final.
Muchas veces nos creamos propósitos pocos realistas, y al no poder conseguirlos es cuando vienen las frustraciones. Soñar es bueno, pero siempre hay que tener en cuenta que para conseguir cualquier cosa tenemos que poner mucha voluntad y actuar. A continuación te presento unos consejos para lograr seguir adelante con tus propósitos y no dejarlos en un mero pensamiento:
Desde el punto de vista de la psicología es muy positivo hacer este tipo de reflexiones, siempre y cuando no se queden en pensamientos son acción ni esfuerzo. No sólo consiste en hacer una lista y ver si a final de año lograste lo que pone, debes concienciarte en ella y llevarla a cabo, hacer lo que puedas por conseguir tus propósitos. No importa que no se cumplan, lo importante es que pongas lo mejor de ti para conseguirlos. Y por supuesto, luchar por ellos, que por ellos solos no llegarán al final.
Muchas veces nos creamos propósitos pocos realistas, y al no poder conseguirlos es cuando vienen las frustraciones. Soñar es bueno, pero siempre hay que tener en cuenta que para conseguir cualquier cosa tenemos que poner mucha voluntad y actuar. A continuación te presento unos consejos para lograr seguir adelante con tus propósitos y no dejarlos en un mero pensamiento:
- Escribe tus propósitos: Anotar tus objetivos hará que sean más reales y accesibles. Pon todo lo que se te ocurra, más adelante ya verás si estás siendo realista con lo que pides y si estás dispuesto a esforzarte por ellos.
- Analiza y escribe las acciones que realizarás: En cada meta que quieres conseguir, apunta los pasos que tienes que dar para acercarte. En este punto tienes que ser altamente realista para ver si vas a tener la paciencia y constancia de crearte una rutina para conseguir lo que deseas.
- Búscate una motivación que te ayude a no abandonar: Cada vez que te entre el desánimo y abandonar, debes pensar en algo que te motive y te ayude a recordarte a ti mismo que nada es fácil de conseguir. Con paciencia y perseverancia se acaba llegando. Imaginarte a ti mismo con tu meta ya conseguida, sentir cómo disfrutas de eso que tanto ansías, hace que sea más fácil luchar por ella.
- Ten paciencia y constancia: Nada llega de repente y por sí solo, hay que tener paciencia y seguir sembrando para más adelante recoger el resultado.
Seguro que este año está lleno de propósitos que queremos cumplir. Son muy diversos los objetivos que nos proponemos, pero hay unos cuantos generales que no deberían faltar en tu lista:
- Caminar más. Parece algo común plantearse este objetivo, como hacer más ejercicio. No es necesario tomarte mucho tiempo en ello ni hacer esfuerzos demasiado grandes, con pequeñas cosas puedes conseguirlo. Por ejemplo, cambia el ascensor por las escaleras, ve a trabajar a pie, aprovecha para sacar al perro a un recorrido largo... Simplemente puedes proponerte pasear por el parque disfrutando del paisaje, en poco tiempo notarás los beneficios tanto física como emocionalmente.
- Comer sano. Está demostrado que la comida saludable no sólo aporta beneficios físico. Nuestras funciones cognitivas, nuestro desempeño físico, nuestra salud física y mental, e incluso nuestro camino espiritual, están significativamente vinculados a lo que ingerimos. A través de una dieta equilibrada, podremos notar como se optimizan ciertas funciones mentales como la memoria, el aprendizaje, la agilidad y velocidad mental, y prevenir estados negativos como la ansiedad y el estrés.
- Aprender, enseñar y compartir. Lee todo lo que puedas. Da igual el tema, lo importante es enriquecerse y aprender. El conocimiento nos hace más grandes, por lo que ¡comparte lo que sabes! En el trabajo, en el gimnasio, durante un café con algún amigo... cualquier momento es bueno para mantener una charla enriquecedora. Puedes proponerte aprender una cosa nueva al día.
- Ser positivo. Es fundamental creer que lograremos los objetivos y no dejarlos al mínimo fracaso. Está demostrado que visualizar lo que queremos consiguiéndolo nos acerca más a la meta porque nos motiva. No dejes que los pensamientos negativos paralicen tu lucha. Todos sabemos que habrá algunos logros que consigamos y otros que no, aprende de todos ellos.
- ¡Disfruta como nunca!: Pon tus esfuerzos en la meta, pero ¡disfruta del camino! Experimenta nuevas sensaciones, conoce nuevas personas, prueba ejercicios diferentes, entrena en lugares nuevos. Descubre todo lo que este nuevo año tiene preparado para ti.
Recuerda que todo lo que te propongas sólo depende de un factos, y ERES TÚ.
